Guía Placer 2007

 
 
Nueva edición Guía Placer 2007


Por Chichila Irazábal / Isabel Mazzucchelli / Titina Núñez

En los próximos días sale la nueva edición de la Guía Placer de restaurantes, bares y cafés, esta vez con una selección de lo mejor de Punta del Este, José Ignacio y Maldonado. Editada por la primera revista uruguaya del buen vivir, la Guía recopila cerca de 500 sitios comentados de forma independiente* por el prestigioso grupo de cronistas gastronómicos de la publicación. A modo de adelanto algunos de sus autores hacen un balance de lo recorrido este año.

Salir a comer en Montevideo y Punta del Este depara una multiplicidad de opciones: sitios pequeños y bien instalados, lugares casi masivos, un centenar de pizzerías, cafés con vistas privilegiadas o restaurantes sobre el mar; carnes tiernas y sabrosas, una generosa oferta de pescados y mariscos, pastas a la uruguaya y postres en general dulces y calóricos. Grosso modo esta es la oferta que hoy el país ofrece en materia gastronómica.
De los casi 500 sitios relevados este año, más de la mitad son lugares simples que tienen como objetivo la minuta, la clásica pizza montevideana (más bien gruesa y muy salseada) y algunos platos de pastas. El resto es una multiplicidad de locales dedicados a la comida étnica (mayoritariamente italiana, mexicana y japonesa), moderna o de autor.
En la mayoría de los restaurantes la oferta está lejos de ser “una nueva propuesta gastronómica” como luce en las publicidades que las anuncian. Son contados los sitios que dejan un recuerdo “imborrable”, y más bien se trata de locales en los que el comensal padece las epidemias de caprese y miniaturas de pescado (o de queso), el entrecot con papas o pollo con verduras salteadas, los brownies y el tiramisú, platos espolvoreados con pimentón, panecillos congelados, un promedio de tres bodegas en la carta y un mozo que pregunta todo-bien-todo-bien aunque el plato no haya sido tocado. ¿Será esto lo que prefiere el público uruguayo cuando sale de su casa?
De todas formas hay buenas noticias: cada vez son más las propuestas que incursionan en los ingredientes y las técnicas que pertenecen a nuestra cultura. El cordero llegó para instalarse y ya puede pedirse sin riesgo de hipotecar el resto de las salidas del mes, las cocciones en horno de barro –esa técnica tan vieja como sana que transforma en manjares las preparaciones más simples– son cada vez más usadas, el servicio ha mejorado si bien en los restaurantes “de vanguardia” es frecuente encontrar mozas –clon promotora– que no tienen idea de nada particularmente concerniente a su materia de trabajo. En este caso nos atrevemos a apuntar que a la hora de sentarse a la mesa es preferible –para el comensal pero también para la caja del restaurante– un/a mozo/a experiente que una bella canchera de bonito ombligo (aunque use piercing). La figura del sommelier se va incorporando de a poco y se instalará definitivamente cuando los restauranteros concluyan que un cliente informado y motivado consume más.
En resumen: si buscamos con cuidado, salir a comer en estas tierras sigue siendo un placer. Hay para todos los bolsillos y los gustos.

*Revistas Placer y Placer Mensual y la Guía Placer tienen como norma visitar los lugares sin anunciarse previamente y pagando en todo caso la consumición realizada. Esta acción incluye los más de 500 restaurantes, bares y cafés que los periodistas de Placer recorren al año.